Han pasado ya 42 años desde que se inaugurase el emblemático circuito extremeño. Era el mes de Mayo del año 1974 cuando se celebrara la primera competición de motocross en este trazado arenoso cuyas características del terreno ponen nombre al propio circuito.
Importantes carreras se disputaban en las décadas de los 70 y los 80, casi siempre en la festividad del patrón cacereño San Jorge en el mes de Abril y por ferias de Cáceres en el mes de Mayo, pruebas a las que siempre el incondicional público de la zona les ha dado gran calor y color con afluencias masivas de 3000 y 4000 aficionados que vibraban con la emoción de las carreras.
En el año 1991 se celebraba la última carrera de motocross antes de un parón de la actividad de casi diez años de duración, quedando un circuito que había sido sede de grandes romerías moteras en el más duro estado de abandono.
Pero en el año 1998, un grupo de seis locos entusiastas de este deporte se unen para reactivar el emblemático Circuito, aportando todo el trabajo que fuera necesario y la cantidad de 10.000 pesetas cada uno para pasar una máquina al trazado y borrar antiguos baches y grandes grietas que el agua había provocado en los últimos años, de momento el objetivo era reactivar y poner en funcionamiento un circuito que había escrito historia en las anteriores décadas dando muchos días de gloria a los pilotos de la época.
Nace el Motoclub “Las Arenas” y comienza a celebrar pruebas de carácter regional, unas pruebas muy bien organizadas a las que no les faltaba ningún detalle y dándoles gran publicidad llegando a registrarse cifras de hasta 5000 espectadores.
El Motoclub “Las Arenas” está constituido por gente muy joven que vive el mundo de la competición también desde dentro de la pista, pilotando motos en varias categorías y modalidades, igual es por esto, que no se pasa ningún detalle, dejando todo como al piloto le gusta encontrarlo y sin descuidar todo lo que hace que el público sea envuelto en una magia que sólo envuelven las emocionantes carreras de motocross.
Con el primer objetivo cumplido, al Motoclub “Las Arenas” le aparecen nuevas ambiciones y comienzan a soñar con celebrar pruebas de los campeonatos nacionales de motocross y transformar un circuito en el que se celebraban dos competiciones anuales en un centro deportivo enfocado a la moto de campo con vida durante todo el año, creando una escuela permanente para el aprendizaje, que ya cuenta con más de 20 alumnos, organizando tandas de entrenamientos semanales para los equipos, presentaciones de marcas comerciales y un sin fín de actividades relacionadas con el mundo del motor y las dos ruedas. Sueños que poco a poco con mucho trabajo, disciplina y dedicación se han ido cumpliendo.
Mientras se trabaja en el acondicionamiento de estas instalaciones para darle ese enfoque de centro dedicado al Off-Road no se dejan de celebrar competiciones que cada vez van teniendo más y más importancia y repercusión.
En 2008 llega el primer campeonato de España, en este caso sólo sería la categoría alevín, pero para el siguiente año se celebraría MX-Promesas y MX-2 sub 23, hasta que en el año 2010 llegara el primer campeonato de España MX-Élite, la categoría máxima y de primera división del motocross nacional. En 2011 se celebró MX-Élite y MX-2 junto a la copa monomarca Team-Green-Cup, siendo uno de los tres únicos circuitos españoles donde se celebraran tres categorías durante esa temporada.
A partir de ahí, cada año, la Real Federación Española de Motociclismo, no ha dejado de confiar en el Motoclub “Las Arenas” para celebrar en el Circuito del mismo nombre, una de las ocho pruebas puntuables para el Campeonato de España de Motocross en sus máximas categorías, albergando pruebas de gran éxito. Y tras siete ediciones con un gran nivel organizativo en la Élite del motocross nacional dará el salto a la organización de carreras internacionales en 2015 con el Campeonato del Mundo de Sidecar-cross, como se suele decir poquito a poco, subiendo la escalera peldaño a peldaño, sin prisas pero sin pausas, contado de forma breve, esta es la historia de un club humilde, trabajador y luchador que ha creído con fuerza en sus proyectos, lo ha transmitido y ha conseguido llegar hasta aquí.
Se trabaja mucho para seguir mejorando las instalaciones, pioneras y modernas en el mundo del motociclismo, consolidar más aún, las pruebas que con mucho trabajo se han ido consiguiendo con el paso de los años. Se soñaba hace ya años con una prueba de carácter europeo, y se ha llegado más allá, el mundial de Sidecarcross, ahora hay que centrar todas las miradas en el Circuito “Las Arenas”, su gran joya.
El trazado ha sufrido, a lo largo de los años, un sin fin de variaciones y mejoras para ir adaptándose a las exigencias de la reglamentación FIM. La singularidad del terreno, que es la arena suelta, ingrediente privilegiado para la práctica de este deporte, le confiere un encanto espectacular y en las grandes celebraciones, el circuito viste sus mejores galas para acoger a sus participantes. Todos estos alicientes, aderezados con el encanto de una afición fiel que no ha cesado de acudir en masa a todas las citas motociclistas allí celebradas, hacen que el visitante se lleve un recuerdo que persistirá en su memoria para siempre.